Los anfitriones son muy agradables y majos, nos facilitaron mucho todo: llegamos antes de tiempo y pudimos quedar en otra ubicación para recoger las llaves. Aunque falta alguna percha en los baños, te dejan lo necesario (papel, fregaplatos, estropajo y algún trapo) para poder empezar tu estancia con comodidad. La ropa de la cama y las toallas están impecables.
El apartamento está a las afueras de Llanes, pero muy cerca (en coche a 5´ del centro y andando a 20´, parte por callecillas y la carretera del pueblo y otra parte por una carretera con tráfico medio pero arcén ancho, aunque por la noche no está iluminada). Muy bien comunicado con los pueblos cercanos. Además, en los alrededores de la casa se aparca bien.
Lo más importante para nosotros fue que nos dejaron llevar a nuestro perro sin ningún problema, y es importante porque no todos los humanos cuidan bien del alojamiento si llevan a su "mejor amigo", y aún asà el apartamento está en perfectas condiciones, asà que repetiremos seguro.